
Sale o sale
El gobierno podó el texto del proyecto a pedido de la oposición para garantizarse la aprobación del acuerdo con el FM
El País 10 de marzo de 2022
La política no es una lotería, pero a veces se le puede parecer bastante.
Ayer el Frente de Todos, por ejemplo, recurrió a la estrategia de la famosa modalidad “sale o sale”. En esta se va rebajando la cantidad de aciertos que se le exige al jugador entre los números elegidos para llevarse el premio hasta encontrar al menos un ganador. De ahí el inmejorable nombre para los aversos al riesgo (sale o sale). Claro que también es la modalidad más costosa para el apostador y puede entregar premios más chicos, porque el pozo generalmente debe compartirse con muchas personas.
Algo así sucedió con el proyecto de ley enviado al Congreso para refinanciar la gigantesca deuda con el FMI. A la propuesta inicial que incluía el detalle del programa económico pactado con el organismo internacional se le fueron recortando artículos y anexos a pedido de la oposición hasta lograr una versión muy escueta pero con mayor cantidad de apoyos. De esta manera el Frente de Todos se aseguró el premio buscado, aunque la victoria se sintió más pequeña y tuvo que compartirla.
El proyecto de ley que esta tarde será puesto a consideración de la Cámara Baja desde las 14 hs solo contará con tres artículos: el primero se limitará a autorizar al Poder Ejecutivo para que realice "operaciones de crédito público" con el FMI y los otros dos serán de forma (publíquese y comuníquese).
Increiblemente, si bien en un principio la oposición exigía conocer la letra chica del arreglo para votarlo, después prefirió un texto lavado en el que no quedara ningún registro del acuerdo alcanzado con el organismo internacional para que en caso de fracasar, como sucedió hasta acá con todos los entendimientos firmados por Argentina en la historia con el Fondo, el gobierno fuera el único responsable.
La solución parece sencilla, pero para llegar hasta ahí hubo decenas de reuniones que tuvieron lugar en varios despachos del Palacio Legislativo entre el presidente de la Cámara, Sergio Massa, y las autoridades de la mayoría de los bloques. El tigrense además tuvo el teléfono en llamas durante toda la tarde y hasta se trasladó dos veces a la Casa Rosada para pulir el texto final.
Pero en el día de mayor rosca política de los últimos tiempos, los gestos componedores de Carrió, los jefes radicales y hasta el propio Macri terminaron siendo determinantes. Un detalle, una vez aprobado irá al Senado. Espera Cristina.