Hace seis días, Elon Musk y el presidente Donald Trump intercambiaron halagos en el Despacho Oval.
La rápida e imprevista implosión de su relación se produjo en una conferencia de prensa y en las redes sociales, luego de la salida de Musk. En ese momento, el multimillonario tecnológico dijo que esperaba continuar como “amigo y asesor del presidente”.
El romance comenzó cuando el hombre más rico del mundo apoyó a Trump para presidente en julio. Musk se dedicó entonces a hacer campaña a su favor. Desde la elección, Musk fue inseparable del presidente al ayudar a dar forma al gobierno federal, a tomar decisiones políticas y a reunirse con otros líderes del mundo.
Pero recientemente, hubieron indicios de desacuerdo. En una ruptura pública anterior con el gobierno,
Musk empezó a criticar públicamente el proyecto de ley de Trump la semana pasada, diciendo en una entrevista en CBS News que estaba decepcionado por las dimensiones de la legislación y su impacto en el déficit.
AEl sábado, Trump dijo que retiraría la nominación de Jared Isaacman, empresario multimillonario y aliado de Musk, para ser el próximo administrador de la NASA. Isaacman fue cliente de la empresa de de Musk, SpaceX.
El martes, Musk contraatacó en X al criticar un ambicioso proyecto de ley republicano de política interior que Trump había respaldado, calificándolo de “abominación repugnante”. El director ejecutivo de Tesla y SpaceX argumentó que el proyecto de ley, que se conoce oficialmente como One Big, Beautiful Bill Actt, podía ser grande o hermoso, pero no ambas cosas.
También insinuó que podría ayudar a desafiar a los miembros del Congreso que apoyaran el proyecto de ley en las elecciones intermedias de 2026. “En noviembre del año que viene, despediremos a todos los políticos que traicionaron al pueblo estadounidense”, escribió.
El presidente también insinuó que habría ganado las elecciones sin la ayuda de Musk. Musk replicó en X diciendo: “Sin mí, Trump habría perdido las elecciones, los demócratas controlarían la Cámara de Representantes y los republicanos estarían 51-49 en el Senado”.
Ayer, Donald Trump, amenazó con anular los contratos gubernamentales con empresas del magnate. El CEO de Tesla respondió en X, red social de la cual es dueño y lo acusó de aparecer en los archivos no publicados de Jeffrey Epstein, el multimillonario acusado de pedofilia y tráfico de menores.
Donald Trump criticó al CEO de Tesla por su oposición al proyecto de ley de recortes de impuestos y gastos que está en el centro de la agenda del presidente de Estados Unidos. "Elon y yo teníamos una gran relación. No sé si seguirá así. Me sorprendió. Estoy muy decepcionado porque Elon sabía los pormenores del proyecto mejor que nadie", sentenció el presidente.
El asesor político de Trump, Steve Bannon, exigió que Elon Musk sea deportado de los Estados Unidos y pidió que investiguen formalmente su estado de inmigración: "Creo firmemente que es un extranjero ilegal".
El principio del fin.
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