El gabinete de seguridad israelí aprobó un acuerdo de alto el fuego en Líbano tras más de un año de guerra con Hezbollah que dejó 3.823 muertos y 1,2 millones de desplazados en el país árabe.
En Israel, 78 personas murieron, 47 de ellas civiles y alrededor de 60.000 tuvieron que dejar sus hogares en el norte del país por el intercambio de fuego. Ahora, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, presentará la propuesta al Consejo de Ministros para su aprobación.
Netanyahu justificó la propuesta para aislar a Hamas en Gaza y recomponerse militarmente, además de para “centrarse en la amenaza iraní”. “Con Hezbollah fuera de la imagen, Hamas se queda solo en la campaña”, afirmó. “Pronto nos armaremos con armas sofisticadas que nos ayudarán a proteger a nuestras tropas y nos darán aún más fuerza para completar nuestras misiones”.
El presidente estadounidense, Joe Biden, compareció poco después del anuncio de Netanyahu. “Hablé con el primer ministro de Israel y el del Líbano y me alegra anunciar que ambos gobiernos aceptaron la propuesta de los Estados Unidos para poner fin a este devastador conflicto”, anunció.
En una fase inicial de 60 días, las tropas israelíes se retirarían de Líbano y Hezbollah se replegaría al norte del río Litani, cumpliendo así con la retirada de personal armado desde la Línea Azul que estipula la Resolución del Consejo de Seguridad.
En su lugar, el ejército de Líbano se desplegaría en la zona sur del país con el apoyo de la misión de paz de la ONU, FINUL. Contemplan también la creación de un organismo internacional, encabezado por EEUU, para supervisar el cumplimiento del alto el fuego y en el que también estarán implicados otros países, entre ellos Reino Unido, Alemania y Francia.
Hezbollah no ha sido parte directa en las conversaciones, en las que el Gobierno de Líbano aseguró que la milicia chiita cumplirá las condiciones. Según el Ejecutivo libanés, se trata de un entendimiento para implementar la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU y no un acuerdo nuevo entre las partes.
El conflicto entre ambas partes estalló el 8 de octubre de 2023, cuando Hezbollah atacó territorio ocupado por Israel, como respuesta a la ofensiva en Gaza.
Israel bombardeó este martes un edificio cercano a una mezquita ubicada en el barrio de Nuweiri, en el centro de Beirut, y el ejército israelí confirmó haber realizado por primera vez operaciones en la zona oriental del río Litani, a unos seis kilómetros de la frontera israelí.