

Israel afirmó que lucha contra “animales” y que actuará en consecuencia. Sourani y los más de dos millones de gazatíes ya sufren las consecuencias. “No habrá electricidad, ni comida, ni combustible, ni agua. Todo está cerrado”, advertía el ministro de Defensa, Yoav Gallant, en el tercer día de guerra. “No pueden esperar que demos agua y electricidad al enemigo”, ha señalado un portavoz militar justificando el asedio.
En 2020, el relator especial de la ONU para Palestina ya denunció que el bloqueo de Gaza representa un castigo colectivo, que a su vez constituye un crimen de guerra. “Aunque la justificación de Israel para imponer el bloqueo a Gaza es contener a Hamás y garantizar la seguridad de Israel, el impacto real ha sido la destrucción de la economía de Gaza, causando un sufrimiento inconmensurable a sus dos millones de habitantes”, denunciaba el relator en su informe.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que esto “solo acaba de empezar” y ha prometido que la operación “cambiará Oriente Próximo” para siempre. La incursión terrestre de fuerzas israelíes en Gaza cada vez parece más probable en lo que sería una nueva fase del conflicto.
Fuentes del Gobierno de EEUU han señalado al Washington Post que esperan el asalto terrestre en las próximas 24-48 horas. La última operación de este tipo en Gaza fue en 2014 tras el secuestro y asesinato de tres jóvenes israelíes en Cisjordania. Israel ha movilizado más de 300.000 reservistas, una cifra nunca alcanzada en un periodo de tiempo tan corto.
En una decisión polémica y criticada, la Unión Europea va a revisar su ayuda a los palestinos pese a que esa asistencia no iba dirigida a Hamás, considerada organización terrorista.
Hamás, que tiene más de 100 rehenes israelíes desde el sábado, la mayoría civiles, ha amenazado con ejecutar a uno por cada bombardeoisraelí sin previo aviso. Los ecos de guerra también han llegado hasta barrios cercanos a Jerusalén, donde Hamás ha disparado varios cohetes hiriendo a siete personas, según medios locales.
Las autoridades israelíes, que habían calificado el ataque de Hamás como su propio 11 de septiembre, lo han comparado este lunes con el holocausto. “En mi mente, no hemos visto tantos judíos asesinados en un solo día desde el holocausto”, ha señalado el presidente, Isaac Herzog.