La sucesión

El papa Francisco designó al cardenal de Bolonia y líder del ala progresista de la Iglesia, Matteo Zuppi, como nuevo presidente de la Conferencia Episcopal Italiana, la entidad que reúne a los obispos de Italia de fuerte tradición conservadora y una de las más importantes ya que tiene como miembro al sumo pontífice.

El flamante nombramiento de Zuppi generó nuevas especulaciones respecto a la continuidad de Francisco al frente de la Iglesia católica debido a que sus problemas de salud complican su movilidad durante los viajes pastorales.

Más allá de los problemas de movimiento, Bergoglio no parece tener complicaciones de salud.

La operación en la rodilla de Francisco, quien a priori no parecería querer acceder, podría demandar un posoperatorio de entre uno y tres meses además de un largo proceso de rehabilitación. En tanto, sus médicos prefieren operarlo para colocarle una prótesis y mejorar no solo su movilidad sino su calidad de vida.

El cardenal Matteo Zuppi, conocido por sus posiciones progresistas y destacado miembro de la Comunidad de San Egidio, involucrada en varios procesos a favor de la paz en África y América Latina, fue designado el pasado martes por el papa Francisco como líder de la iglesia italiana.

Al igual que Francisco, en los últimos años pregonó la integración de los inmigrantes y en favor de promover la diversidad en la Iglesia, como el trato favorable a gays y lesbianas. "Cuando en nuestras comunidades comencemos en serio a mirar a las personas como las mira Dios, entonces también las personas homosexuales y todos los otros comenzarán a sentirse naturalmente parte de la comunidad", escribió.

Pietro Parolin, el actual secretario de Estado y quien acompaña al Papa en los viajes eclesiásticos con agenda más política, es otro de los nombrados como candidato a la sucesión