

La deuda externa bruta total alcanzó los US$ 305.043 millones en el segundo trimestre de 2025, lo que representa un incremento de US$ 23.783 millones, +8,5%, con respecto al trimestre anterior, según el INDEC.
El stock de pasivos creció fuerte entre abril y junio, debido fundamentalmente a la asistencia de organismos internacionales, en un contexto de creciente déficit de divisas.
El nivel de endeudamiento bruto a valor nominal registrado a finales de junio pasado es el más alto en las series históricas del organismo estadístico. Desde que asumió Javier Milei en diciembre de 2023, la deuda externa bruta de Argentina a valor nominal creció en US$ 19.092 millones.
Este aumento se originó principalmente por el incremento del endeudamiento del gobierno en US$ 18.480 millones por los préstamos recibidos por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y otros organismos multilaterales de crédito.
Por su parte, el endeudamiento de sociedades no financieras y hogares subió US$ 2.435 millones, mientras que el del Banco Central se incrementó en US$ 2.380 millones, respectivamente.
En valor de mercado, el stock de deuda externa bruta total alcanzó los US$ 284.905 millones, mostrando un incremento de US$ 24.669 millones con respecto al trimestre anterior.
El total de deuda con organismos internaciones ascendió a US$ 92.964 millones en el segundo trimestre, mostrando un incremento de 20,8% respecto al período anterior.
Del total al 30 de junio, la deuda con el FMI ascendía a US$ 55.17 millones, con un aumento en US$ 13.994.
El informe oficial destacó además que más del 70% de la deuda externa en moneda extranjera corresponde a vencimientos de largo plazo, lo que en principio otorga un mayor margen de maniobra en términos de pagos inmediatos. Sin embargo, la concentración de compromisos con organismos multilaterales y la debilidad de las reservas internacionales del BCRA hacen más compleja la gestión de la deuda.
En paralelo, la continuidad del déficit de cuenta corriente y la baja capacidad de generación de dólares de la economía argentina limitan las posibilidades de estabilizar la dinámica de la deuda.