El Gobierno defiende el presupuesto y le hace un guiño a las universidades
Economía08 de octubre de 2024La iniciativa de Milei plantea la regla del déficit cero. Habrá cruces por el veto a la ley de Financiamiento Universitario, un día antes de la sesión para su insistencia.
Los representantes de Economía expondrán desde las 14 en el marco de la comisión de Presupuesto. El cronograma de máxima del oficialismo es obtener media sanción para fines de noviembre, principios de diciembre.
La discusión por el Presupuesto 2025 quedó relegada por la profundización de la crisis entre el Gobierno y las universidades nacionales. El veto de Milei a la ley de financiamiento motorizó a la oposición para votar la insistencia de la norma mañana mismo. Pero a lo que compete a la audiencia de comisión de hoy, la novedad es que la polémica seguramente se meta en la exposición de los funcionarios. Se espera que los funcionarios de Economía hagan un guiño al sector para descomprimir la tensión, luego de que anoche se conociera la oferta oficial de un 6,8% de aumento al personal universitario.
La expectativa es que expliciten que habrá una mejora en las partidas presupuestarias para las universidades dentro de la Ley de Leyes. Actualmente el proyecto de Presupuesto apenas otorga un aumento del 28% con respecto a este año para las 60 casas de altos estudios en todo el país, muy por debajo de la inflación. Mientras que el Consejo Interuniversitario Nacional estimó que necesitan $7,2 billones, Economía le otorgó en el texto de la iniciativa 3,8 billones, es decir casi la mitad.
Esa estrategia va en línea con la actitud del Gobierno: como el rechazo al veto es posible, el Ejecutivo explora como alternativa la reasignación de partidas previstas para Salud o proyectos de obra pública en las provincias. Según cálculos oficiales, la norma universitaria, que garantiza recomponer la pérdida salarial de este año y un piso sobre la inflación hacia adelante, compromete el 0,14% del PBI.
El PRO, aliado de La Libertad Avanza, ya instaló ayer la necesidad de que el tema de las universidades esté en la agenda del Presupuesto 2025. En su comunicado, garantizó su apoyo al veto a la ley pero instó al Gobierno a que “incluya las necesidades de las universidades en el proyecto de presupuesto 2025 de manera prioritaria”. Por la noche la Oficina del Presidente anunció una suba de los salarios para descomprimir la paritaria, pero el conflicto aún parece lejos de clausurarse.
Pese a los gestos, la educación no es una prioridad para Milei, porque así como le recortó a las universidades, en lo que respecta a la educación inicial y media, el proyecto libertario suspende el Artículo 9° de la Ley de Financiamiento Educativo que garantizaba el financiamiento del sistema. Como contrapartida, por ejemplo, le otorgó a la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) el doble del presupuesto que el actual: de $101.816 millones a $197.238 millones para el año próximo, lo que representa un aumento del 94%.
El pilar del déficit cero lleva al extremo el uso de la billetera del Estado, porque si los ingresos son menores a los pronosticados, entonces también se reducirán los gastos. La única partida que Milei decidió que no se reducirá será la de los vencimientos de la deuda.
En el texto, en la web de Diputados, el Gobierno plantea como prioridades de su gestión tres puntos: ordenar la macroeconomía, aumentar la seguridad y fortalecer la defensa. Las demás cuentas son ajustables –sin importar su impacto social– y deberían correr por cuenta del mercado o los gobiernos provinciales y municipales.
Se plantean subas de impuestos porque habrá más recortes de subsidios a la luz, el gas, el agua y el transporte y es una duda aún sin saldar si el Gobierno subirá las retenciones al agro.