Fuerte suba en la tarifa de gas para usuarios residenciales, comercios e industrias de todo el país. Enargas publicó ayer los cuadros tarifarios que van a impactar en la factura de abril, que se paga en mayo.
Confiado en que mantendrá el sendero de desinflación en abril a fuerza de ajuste fiscal y dólar planchado, el Gobierno oficializó un aumento en las facturas de gas en todo el país con sabor a tarifazo.
Las resoluciones 112 a 123 del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), establecen los nuevos precios del gas para las distintas distribuidoras del país, Transportadora Gas del Sur, Transportadora de Gas del Norte, Gasnor, Nartugy BAN, Distribuidora de Gas Cuyana, Distribuidora de Gas del Centro, Litoral Gas, Gas NEA, Metrogas, Camuzzi Gas Pampeana, Camuzzi Gas del Sur y Redengas.
En el área metropolitana, los incrementos son, en una primera ronda, de entre 350 y 460% para usuarios residenciales sin subsidios. En las zonas frías, el incremento sería mayor, aunque se aplanaría en los meses de invierno. Y un aumento en los cargos fijos golpeará con más fuerza en los sectores de ingresos bajos, aunque tendrán un bloque de consumo subsidiado.
Además, desde mayo comenzará a regir la nueva fórmula de actualización mensual de las tarifas, que estará atada a la evolución de los salarios, la inflación mayorista y el índice del costo de la construcción del INDEC.
Energía informó además que dispuso un aumento mayor en los cargos fijos que en los variables, “con el objetivo de reducir las variaciones estacionales en las facturas”.
Cuanto más peso tenga en una factura el cargo fijo menos se busca el cuidado del recurso y más la mejora de los ingresos de la empresa junto con la recaudación de impuestos.
La suba inicial es fuerte: en los segmentos de ingresos medios y altos -con subsidios acotados y sin subsidios-, el gas mayorista (PIST, o Punto de Ingreso al Sistema de Transporte) pasará de 0,70 dólar por millón de BTU a 2,94 dólares, más los nuevos cargos por transporte y distribución.
Pero, para el invierno, entre mayo y septiembre, el gas subirá a u$s 4,50 dólares. Es un incremento del 540% en el insumo. En los segmentos medios y bajos, el incremento será menor. A eso se agregarán indexaciones mensuales por precios mayoristas y salarios para el transporte y la distribución.
Por eso, las estimaciones de consultores privados se estiran hasta 700% de aumento.
En el caso de Distribuidora de Gas del Centro (Ecogas) fue autorizada a aplicar incrementos de entre el 177% y el 810% en el cargo fijo. La amplia variación se debe a que desde ahora no habrá diferencia entre los cargos fijos que paguen los tres diferentes niveles de usuarios.
Por ejemplo, un usuario categoría R2-3, la más común en Córdoba, que pagaba un cargo fijo de entre $ 853 y $ 1.172 según el nivel de segmentación, abonará ahora $ 7.766 (para todos los niveles).
En cuanto al valor del metro cúbico, los incrementos serán entre el 193% y el 297%, siempre de acuerdo a la categoría de consumo y al nivel de segmentación vigente.
En la premisa del ajuste clásico con el que el Gobierno nacional espera bajar la inflación,a partir del ancla fiscal y la monetaria, la suba de tarifas era impostergable. Caputo necesita bajar los subsidios, que significan gastos por entre 1,5 y 2 puntos del PBI. En el área metropolitana se sumarán, más temprano que tarde, los aumentos en transporte y agua, que recalentarán los precios en el corto plazo. Según la consultora Analytica, el tarifazo oficializado agregará al índice de inflación de abril entre 2 y 2,5 puntos porcentuales.
Si se desploma la actividad y se mantiene el apretón monetario, la inflación va a ceder, pero con una mayor caída en la actividad económica. La pregunta es hasta dónde es sostenible destruir actividad y empleo para bajar la inflación.
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