Detectan por primera vez el ruido cósmico de un agujero negro, explicado por Einstein hace un siglo

El mundo29 de junio de 2023
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Hace 25 años que los astrónomos iban tras él y finalmente lo encontraron: el ruido cósmico emitido por el torbellino de gigantescos agujeros negros fue identificado gracias a una técnica inédita de detección de ondas gravitatorias que abre “una nueva ventana al Universo”.

Estos resultados, son fruto de una vasta colaboración de los mayores radiotelescopios del mundo que consiguieron captar esta vibración del Universo con “la precisión de un reloj”.

Las ondas gravitacionales fueron predichas por Einstein en 1916, pero no pudieron ser detectadas hasta 100 años después. Se tratan de ínfimas perturbaciones del espacio-tiempo, parecidas a las ondas de agua en la superficie de un estanque.

Estas oscilaciones, que se propagan a la velocidad de la luz, nacen por el efecto de eventos cósmicos violentos como la colisión de dos agujeros negros.

Aunque están vinculadas a fenómenos masivos, su señal es extremadamente tenue. En 2015, los detectores de ondas gravitatorias Ligo (Estados Unidos) y Virgo (Europa) revolucionaron la astrofísica al detectar un estremecimiento procedente de la colisión entre dos agujeros negros con una masa diez veces superior a la del Sol.

Esta vez, una señal mucho más dilatada en el tiempo evoca un fenómeno de mayor escala, captado por una red de telescopios de Europa, Norteamérica, India, Australia y China del consorcio International Puslar Timing Array (IPTA).

“Hablamos de ondas gravitatorias generadas por agujeros negros de varios millones a varios miles de millones de veces la masa del Sol”, dijo Gilles Theureau, astrónomo del Observatorio de París-PSL.

La hipótesis principal apunta a parejas de agujeros negros supermasivos, cada uno de ellos con un tamaño superior a nuestro sistema solar, “listos para chocarse”, explicó Theureau.

Antoine Petiteau describe a dos colosos que “giran uno alrededor del otro antes de fusionarse”, un baile que provoca ondas gravitacionales de “un periodo de varios meses a varios años”.

Un ruido de fondo continuo que Michael Keith, de la red europea EPTA (European Pulsing Timing Array), compara con “un restaurante bullicioso con mucha gente hablando a tu alrededor”. También se lo comparó como un “mar picado agitado por violentos eventos”.

Las mediciones no permiten todavía decir si este ruido evoca la presencia de varias parejas de agujeros negros o de toda una población. Otra hipótesis sugiere un origen procedente de los primeros años del Universo, conocido como el periodo de inflación. “Abrimos una nueva ventana al Universo”, dijo Theureau.

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