Renta extraordinaria: beneficios en plena crisis energética mundial

El secretario general de la ONU propuso gravar la renta extraordinaria de las empresas energéticas.

La semana pasada se conoció que las petroleras ExxonMobil, Chevron, Shell y Total Energies acumularon ganancias por un valor conjunto de U$S 51.000 millones en el segundo trimestre de este año, el doble que en el mismo período del año pasado.

En ese contexto, Antonio Guterres sostuvo que los gobiernos deben “gravar estas ganancias excesivas y utilizar los fondos para apoyar a las personas más vulnerables en estos tiempos difíciles”. Para el portugués es inmoral que las compañías energéticas obtengan ganancias récord de la crisis energética a costa de las personas y comunidades más pobres.

Fue en la conferencia de prensa en la que se presentó el tercer informe del Grupo de Respuesta de la ONU a la Crisis sobre el impacto global de la guerra de Ucrania.

El poder
Reino Unido aprobó en julio un impuesto del 25% a los beneficios extraordinarios de los productores de petróleo y gas en el Mar del Norte.

Otros países como Italia han aplicado medidas similares, mientras en Francia los legisladores rechazaron hacerlo.
En EE.UU. un grupo de legisladores demócratas ha planteado gravar a las principales petroleras del país y redistribuir lo recaudado a los ciudadanos, una propuesta que, según analistas, es difícil que salga adelante en el Congreso.

En su intervención, el secretario general de la ONU destacó la dificultad de sacar adelante este tipo de medidas por "un problema de cabildeo" y aseguró que "a veces los lobistas son muy poderosos y tienen mucha influencia".
También advirtió que los altos precios de la energía tendrán graves consecuencias por la elevada presión a la que se ha sometido a gobiernos y hogares de todo el mundo.