El gigante ruso Gazprom redujo en las últimas horas el suministro de gas a Italia, Francia y Austria tras haber cortado el suministro a Polonia, Bulgaria y Finlandia en medio de una guerra de sanciones entre Europa y el Kremlin por la invasión a Ucrania.
La empresa italiana Eni denunció que envió una solicitud para comprar 63 millones de metros cúbicos y Gazprom le respondió que solo suministrará un 50% de la cantidad demandada.
Es el tercer día consecutivo en que la firma rusa disminuye las cantidades enviadas a Italia, país dependiente del gas ruso porque importa un 95% del suministro que consume. Un 40% de sus compras en el extranjero procedieron de Rusia en 2021.
Hay una utilización política del gas, como del trigo. Gazprom argumentó que se vio obligado a paralizar un equipo del grupo alemán Siemens debido a la falta de componentes que el grupo alemán debía entregarle y no lo hizo debido a las sanciones contra Rusia por la invasión a Ucrania.
Berlín, sin embargo, principal consumidor de gas ruso en la Unión Europea denunció una "decisión política" y un "pretexto" de Moscú.
Francia
Además, el operador del sector francés denunció hoy que hace dos días que no recibe gas ruso por gasoducto, debido a la "interrupción del flujo físico entre Francia y Alemania".
El gas ruso representa un 17% del usado en Francia, adonde puede llegar por gasoducto o en forma líquida en barcos. La mayoría del gas importado llegaba habitualmente por el gasoducto Nord Stream 1, a través de la interconexión con Alemania.
Los suministros cayeron un 60% desde principios de año, según el operador de la red francesa de transporte de gas GRTgaz, que precisó que desde el miércoles, el abastecimiento se redujo a cero, informó la agencia de noticias AFP.
Francia importa no obstante gas desde otros países como España, que reforzó su suministro. Y aumentó sus compras de gas natural licuado (GNL), que llega por barco a las terminales, ya cercanas a su punto máximo técnico, según GRTgaz.