De la formación neuquina hoy se extrae 52% del petróleo y 46% del gas que se consume en el país. Hacia 2030 podría exportar US$ 30.000 millones por año.
La producción de petróleo y gas natural en la Argentina está en el mejor momento de los últimos 20 años, gracias al desarrollo de Vaca Muerta. Luego de un pico histórico en el petróleo en 1998 y en gas en 2004, la producción petrolera tuvo una fuerte declinación que lo llevó al mínimo en 40 años en 2017, con excepción de la pandemia en 2020, para luego tener un fuerte repunte debido a la consolidación del shale.
Según datos de las consultoras Economía & Energía y Aleph Energy, la producción de petróleo alcanzó en marzo los 689.000 barriles por día, de los cuales el 52% fue no convencional, shale de Vaca Muerta.
En gas, la producción trepó a 134 millones de metros cúbicos diarios (MMm3/d), con una participación del 46% del shale. En marzo se llegó a 1.000 millones de barriles equivalentes de petróleo producidos en gas y petróleo de Vaca Muerta desde que Repsol perforó el primer pozo de shale gas en 2010.
En materia comercial, el superávit en la balanza energética durante el primer trimestre llegó a 1.670 millones de dólares y se estima que el resultado positivo se expandirá hasta US$ 3.300 millones a fines de 2024.
Vaca Muerta tiene recursos equivalentes a 6 veces el consumo de energía de la Argentina durante los próximos 20 años, según estimaciones de petroleras.
Argentina podría producir 1 millón de barriles por día y exportar 22.000 millones de dólares por año.
Proyecciones más optimistas elevan la perspectiva exportadora a US$ 30.000 millones anuales. El recurso del petróleo no convencional de Vaca Muerta puede contribuir con la estabilización macroeconómica del país al ser un importante generador de divisas, a través de la exportación.
Por Vaca Muerta, la Argentina ya es un exportador estructural de petróleo y, en el marco de la evolución energética, tiene el potencial de proveer al mundo volúmenes crecientes de energía confiable, asequible, y baja en carbono.
Incluso, la productividad de un pozo promedio de Vaca Muerta está por encima de los pozos de shale de los Estados Unidos.