Las reservas en rojo

Algunas actividades pueden mejorar el saldo del Banco Central en lo inmediato, pero otras pueden protagonizar un cambio estructural y dar un salto en los próximos años.

El País 11 de agosto de 2022
6F1B6240-A632-498D-ADE2-B677B3EC2F32

En un acto que otra vez lo tuvo en el centro de la escena, Sergio Massa, dijo que la salida de las reservas del Banco Central de los últimos meses se debió a la necesidad de cubrir los gastos impulsados frente a la demanda energética a raíz de la guerra entre Rusia y Ucrania. Secundado por el presidente Alberto Fernández, el superministro remarcó que la decisión del Gobierno se sustentó en "no cortarle el gas ni la luz" a la población.

La pérdida por goteo que sufre el Banco Central en sus reservas netas le sumó tensiones devaluatorias al tipo de cambio, ya que el mercado desconfía de la capacidad de restauración del poder de fuego de la entidad monetaria por medio de la suba de exportaciones y considera "peligroso" un plan de endeudamiento a mediano plazo.

En este sentido, en el marco de la conferencia de prensa se anunció un esquema de adelanto de exportaciones para el campo y un régimen de promoción para agroindustria, minería, hidrocarburos y economía del conocimiento con beneficios para el crecimiento de exportaciones. Resta ahondar en mayores detalles sobre las medidas.

Ahora bien, ¿qué pueden aportar cada uno de estos sectores productivos? Por empezar, es necesario diferenciar los que tienen chances de mover el amperímetro en lo inmediato, de aquellos con posibilidades de protagonizar un cambio estructural y dar un salto exportador en los próximos años.

3047EC76-10EC-4C2B-AFA5-80E94820CE63

Dentro de los primeros ubicamos al sector agrícola. Que en las próximas semanas haya una afluencia de divisas provenientes de este sector tendrá que ver con un incentivo económico a la liquidación de granos ya cosechados en la campaña y no con un cambio positivo en la performance exportadora. Se debe tener en cuenta que el oleaginoso es el primer complejo exportador argentino y junto con el sector cerealero son responsables de más del 50% de las exportaciones nacionales. La fuerte dependencia que tiene la economía argentina sobre los dólares que ingresa este sector explica los esfuerzos que en las últimas semanas se dedicaron a generar un instrumento financiero que actué de incentivo económico para adelantar liquidaciones.

Entre los segundos, es decir, aquellos con potencial para experimentar una suba drástica de sus exportaciones en los próximos años ubicamos a la energía. Los hidrocarburos constituyen el sector con mayores posibilidades de convertirse en una nueva y gran plataforma exportadora argentina. En Vaca Muerta se encuentra el segundo yacimiento no convencional de gas del mundo y el cuarto de petróleo, a lo que podrían sumarse nuevos yacimientos off shore a descubrir en el Mar Argentino. En los próximos 10 años, este sector estará en condiciones de pasar de ser deficitario a ubicarse en segundo puesto en materia exportadora. Lograr el autoabastecimiento energético es clave para proyectar un modelo de desarrollo productivo, sobre todo en un contexto marcado por conflictos geopolíticos. Países europeos desarrollados como Alemania altamente dependientes de la provisión rusa están comenzando a sentir los efectos de la escalada de precio en su competitividad industrial y en la calidad de vida de su población a partir de las drásticas reducciones de consumo conocidas recientemente. 

Similares posibilidades plantea el desarrollo minero. Las exportaciones del sector tienen la potencialidad de triplicarse en los próximos diez años y llegaría a aportar US$10.000 millones anuales a través de sus ventas al exterior, sobre todo impulsado por el cobre y el litio. El cobre, tiene diversas aplicaciones industriales y tecnológicas y se utiliza tanto en el rubro de la construcción como en las más complejas fabricaciones de insumos electrónicos, como microprocesadores. El litio, mineral presente en grandes cantidades en los salares de Catamarca, Salta y Jujuy, es el mineral del futuro, clave para la transición energética ya que se utiliza para la fabricación de baterías. De cada 100 dólares vendidos por la minería 68 constituyen una generación neta de divisas para la economía argentina, según el trabajo del CEP XXI que estudia cuánto deja la minería en el país.

Por último, la economía del conocimiento, constituye un complejo exportador afianzado. Este sector, intensivo en capital humano, exporta más de US$6.000 millones anuales en servicios profesionales. En él se incluyen la mayor parte de las empresas argentinas consideradas unicornios –empresas que superan una valuación de mercado de US$1.000 millones– dedicadas a vender servicios de software aplicado al comercio electrónico, fintech y diseño digital principalmente.

En síntesis, Argentina tiene oportunidades en estos y otros sectores para superar en el corto plazo la situación de restricción externa que históricamente ha constituido el principal límite al crecimiento económico. Sostener en el tiempo la políticas para los sectores productivos competitivos y con potencial exportador y promover el agregado de valor y la actualización de los sectores tradicionales parece ser el camino.

Te puede interesar
Lo más visto