

La Unión Europea acordó un proyecto de ley para establecer una representación mínima del 40% de mujeres en los puestos directivos no ejecutivos o del 33% de todos los puestos directivos de las grandes empresas europeas.
La iniciativa, que estuvo bloqueada durante una década, contempla medidas vinculantes para lograr este objetivo. Una vez aprobada formalmente, será incorporada a las legislaciones nacionales de los países de la UE y se implementaría a partir de 2026.
Según los datos difundidos en la actualidad ocho países de La Unión ya tienen fijadas cuotas mínimas por género en los consejos de administración de las empresas. Otros 10 países habrían optado por recomendaciones legales, mientras que los ocho restantes no contemplan obligación alguna en este campo.
Para las empresas que no cumplan con las cuotas de género, la directiva deben explicar sus criterios con claridad y transparencia y subrayar la neutralidad de sus procesos para elegir a quienes ocupan lo puestos de dirección. Además deberán priorizar al género infrarrepresentado cuando haya candidatos de diferente sexo en igualdad de condiciones. La batería de medidas para logra la igualdad continúa con la obligación para las compañías de publicar los criterios de calificación cuando el candidato no seleccionado lo pida, siendo las sociedades las responsables de demostrar que no se ha transgredido ninguna medida.
“Las empresas que no cumplan el objetivo de esta directiva deben informar de las razones y las medidas que están adoptando para subsanar esta deficiencia”, apunta la propia Comisión, que, a continuación, deja claro que si no se cumple con ella, los Estados miembros deben imponer castigos disuasorios, y esto incluye multas y la anulación del nombramiento impugnado.
“El desequilibrio de género es más del doble en los países que no han tomado medidas sustanciales que en los que sí las han introducido. Los países con cuotas tienen la mayor proporción de mujeres en los consejos de administración de las empresas que cotizan en bolsa. Sin embargo, a día de hoy, sólo un Estado miembro ha logrado un equilibrio efectivo de género en los consejos de administración de las empresas”, argumenta la Comisión para sostener su posición.