Olé, Oleee “Cutiiii”: el día que Romero fue tan grande como Messi

Deportes 09 de septiembre de 2023
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En el inicio de la eliminatoria, el cordobés puso el Monumental a sus pies como Leo con su gol. Es el defensor que anticipa, quita, reta, asusta a rivales y se proyecta. Surgió desde los potreros de barrio Villa Rivadavia, fue campeón de América y del Mundo.

Había que ver esas caras en el Monumental de Núñez. Adentro de la cancha y en las tribunas. Cómo estaban esos rostros de los jugadores de la selección argentina y de varios jugadores de Ecuador.  El asombro los invadía tanto como a las 84.500 personas que se llegaron a ver a la Scaloneta en su debut eliminatorio rumbo al Mundial 2026 para retener el título logrado el año pasado en Qatar y camino a la Copa América 2024 que ganó en 2021.

La descripción podría adaptarse para el gol de Lionel Messi, de tiro libre que definió el juego. Tranquilamente. Pero no. Esta vez ese combo de sensaciones lo despertó un cordobés. El “Olé, olé, olé, oléeeee....Cuti, Cutiiii” de la multitud, bajó majestuoso hasta el césped.
  
Ahí y ese jueves 7 de setiembre de 2023, Cristian  Romero había sido tanto para Argentina como el propio “Leo”. O más. “Cuti” había tenido partidos consagratorios en la selección, pero nunca había recibido semejante reconocimiento. Fue ese día. 

El defensor de Tottenham levantó al público en cada intervención. El hit tronó una, dos y tres veces en el segundo tiempo. aún cuando la selección iba 0-0.

Salió jugando siempre y hasta se proyectó en ataque, un acto inesperado para el rival y alarmante para Scaloni ya que había dejado su puesto de zaguero para romper, a riesgo de algún contraataque ecuatoriano.

Hasta tuvo chances pero se la sacaron justo. En su zona, había sido un mariscal colosal. Anticipando o esperando quitó siempre. Neutralizó ataques rivales parándola de pecho para salir jugando. Cuando le jugaron a la espalda para la velocidad de Enner Valencia, fue quirúrgico y humillante. Barrió justo y en el área. Ni antes ni después. Y se le fue al humo a la figura ecuatoriana para retarlo porque había simulado una caída. 
Lo asustó, como lo hizo con Mbappé en la final del Mundial de Qatar. Fue el cuco del francés como el del ecuatoriano, ja. 

Messi lo miraba y se reía. Le marcó el pase en las dos o tres pasadas que hizo al ataque. 
Lo hizo en el Monumental como en el estadio Luisail de Qatar (ante los galos en 2022). De la misma manera, que en el Maracaná (final de Copa América 2021 con Brasil), en los estadios de la Premier, de Italia, Kempes, Julio Cesar Villagra de Belgrano o en el Llamil Simes de su querido San Lorenzo de barrio Las Flores. Entero o infiltrado.  
Porque llegaba lesionado a la final de la Copa América 2021 y no se la iba a perder.   

En su legajo del jueves sus números fueron:
➜ 1º en recuperaciones [12]. 
➜ 1º en quites de pelotas [7].
➜ 1º en duelos ganados [11/15].
➜ 1º en pases precisos, 66 de 67.   

Su historia
Romero fue a la selección después de una charla que Scaloni tuvo con el cordobés Hugo Tocalli, parte del gran equipo de José Pekerman en la selección argentina de mayores y juveniles. “Tocalli me dijo hace 4 o 5 años: ‘Hay un 2 en Belgrano de Córdoba. Acuérdese de ese nombre’. Hoy no tiene techo. Tiene un nivel muy alto. Tiene personalidad”, comentó hace poco el DT de Argentina. 

Esa condición, Romero la demostró de bien chiquito, en los potreros de barrio Villa Rivadavia. Su casa quedaba frente a la plaza principal, donde siendo niño llamaba la atención por su juego y determinación. Víctor “Quito” Romero jamás se cansará de hablar del menor de sus tres hijos. “ Fue un animal ante Cibi, en la Liga Cordobesa, como con Mbappé o Valencia. Y soñó todo con la selección, desde San Lorenzo de barrio Las Flores. Nosotros lo tomamos como la expresión de un niño, pero él nos lo dijo justamente en un partido ante Cibi. Había terminado de jugar Franco, que es el mayor, y él ya sentía el fútbol como lo demuestra ahora”, dijo “Quito”. 
“Desde que le dicen ‘Cuti’ la tuvo clara. El apodo se lo puso su hermana Aldana. A ella no le salía decirle Cristian.
Solo podía decirle ‘Cuti’. De ahí quedó”, comentó papá Romero. 

El defensor empezó jugando en San Lorenzo de barrio Las Flores de la Liga Cordobesa, fue a préstamo a Talleres, se le venció y firmó con Belgrano. Luego, pasó a Genoa, lo compró Juventus, fue cedido a Atalanta y de ahí a Tottenham.. 

Con 25 años, es uno de los mejores zagueros del mundo. O el mejor.

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