El Senado de Brasil aprobó una ley que obliga a las empresas a pagar salarios equitativos a mujeres y hombres que realicen el mismo empleo. En caso de incumplir, las compañías deberán abonar una multa diez veces mayor al salario del empleado damnificado.
El texto también lucha contra la discriminación de raza, etnia, origen y edad.
El proyecto también obliga a las empresas que tengan más de 100 empleados a publicar informes semestrales de transparencia salarial. Si se detectan desigualdades en los sueldos las compañías deberán presentar un plan de acción para mitigarlas.
El proyecto fue presentado por el Poder Ejecutivo en marzo como una de las propuestas de campaña de Lula da Silva y ahora deberá ser promulgado.
La propuesta era una de las promesas cuando llegó en el poder en octubre donde había un compromiso con la igualdad de género, la lucha contra el machismo y la violencia doméstica.
El pasado 1 de mayo, en el Día Internacional del Trabajo, Lula dijo de su iniciativa que apuntaba a que "por primera vez, sin comas, ni puntos, la mujer gane el mismo sueldo que el hombre".
"Después de milenios de existencia", las mujeres continúan siendo tratadas en el ámbito laboral como "si fueran inferiores (…) es una vergüenza la falta de respeto contra las mujeres en el trabajo", había afirmado el presidente.
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