La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) aprobó el uso de la “ARVAC Cecilia Grierson”, la primera vacuna desarrollada íntegramente en Argentina como refuerzo contra el COVID-19.
Este desarrollo fue posible a partir de un consorcio público-privado que contó con más de 600 científicos y profesionales, 25 instituciones y 2.094 personas voluntarias.
El visto bueno de la ANMAT significa que la dosis demostró ser segura y eficaz como refuerzo contra el virus en mayores de 18 años. Actualmente, ya se produce en la planta de Cassará en la Ciudad de Buenos Aires y puede adaptarse a nuevas variantes de SARS-CoV-2 circulantes en la región.
Una pandemia disruptiva empujó a la ciencia y a la innovación para mostrar su mejor versión. Pero además del trabajo mancomunado entre cada uno de los eslabones, se pudo lograr y se terminó. La vacuna de plataforma de proteínas recombinantes contra COVID-19 ARVAC - Cecilia Grierson demostró ese recorrido desde su primera fase de investigación hasta el momento que llegarán al brazo de las personas, representa un impacto potente.
La vacuna ARVAC Cecilia Grierson es la primera creación nacional dirigida al COVID-19 y se destaca por ser bivalente; esto significa que contiene dos antígenos diferentes que le otorgan una superior habilidad para neutralizar las variantes actuales del virus SARS-CoV-2, incluyendo a Ómicron, sus subvariantes, Gamma y la versión original de Wuhan.
La vacuna 100% argentina fue presentada al mundo en la revista científica Nature el 28 de julio pasado. El equipo científico a cargo de la vacuna ARVAC-Cecilia Grierson contra el COVID-19, presentó los detalles de la Fase I, al publicar un paper. Allí abrieron la trastienda de la investigación de la entonces nueva candidata.
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