Después de que en los últimos días se intensificara la crisis migratoria en la isla italiana de Lampedusa, al este de Túnez, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, anunció un plan de 10 puntos para aliviar la recepción de migrantes en Italia.
Italia es uno de los principales centros de recepción de migrantes africanos. En los últimos días la isla de Lampedusa, recibió a más de 7 mil migrantes, uno de los mayores registros históricos.
Dentro de las propuestas, se encuentra coordinar con los países emisores de migrantes planes de repatriación, aumentar la vigilancia en las fronteras y crear mecanismos para repartir de forma más equitativa la llegada de migrantes entre los países del bloque.
Meloni, cuyo gobierno de extrema derecha asumió el poder en octubre pasado, dijo que la afluencia amenazaba "el futuro de Europa" y que se necesitaban "soluciones serias", como tomar medidas enérgicas contra los traficantes de personas, deportar rápidamente a los inmigrantes ilegales y actuar rápidamente para implementar una ley.
"Si alguien piensa que esta crisis a la que nos enfrentamos podría resolverse dentro de las fronteras italianas, sería un error muy grande, porque este problema afecta a todos y debe ser abordado por todos", afirmó Meloni. "Sigo diciendo que nunca lo resolveremos hablando sólo de redistribución [de los migrantes]; la única manera de resolverlo es detener las salidas".
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