André Onana ha sido uno de los nombres de la última jornada del Mundial de Catar. El arquero abandonó la concentración de Camerún antes de lo previsto debido a, según su entrenador Rigobert Song y su federación, cuestiones disciplinarias. Sin embargo, el jugador del Inter ha querido dio su versión desde el aeropuerto de Doha antes de regresar a su país.

"Estoy bien. Si es justo o no es justo ya no importa. Lo más importante es que el país gane siempre y les deseo muchísima suerte", afirmó desde Catar. "Ahora solo me queda apoyar al equipo y desearles mucha suerte", afirma el guardameta, afectado por la decisión pero transmitiendo toda la suerte para sus compañeros.

El desencadenante de su expulsión habría sido una discusión con su entrenador sobre su forma de jugar. Song le pedía un juego más tradicional, golpeando más en largo, mientras que André Onana, hábil con los pies, prefería tocar desde su propia área. Sin embargo, lo niega. "¿El juego con los pies? No, no hay nada".